Capítulo 39: La caballería y el hombre que llegó tarde.
Todos los derechos pertenecen a Tappei Nagatsuki, el autor original de la serie Re: Zero.
Esta no es una traducción profesional. Algunos errores, tanto gramaticales como lógicos, son inevitables. Además, tenga en cuenta que los traductores tienen una predisposición a las preferencias personales y que los nombres y la terminología pueden diferir en ocasiones de lo que se usó en el anime o se usa en el fandom en general.
PDF(COLABORACIÓN DE RAM-DESU)
CORRECCIÓN Y DETALLES: STALYN
Después de la conversación en la que
renovaron su resolución, Subaru y Anastasia bajaron las escaleras del
Ayuntamiento.
La gran sala donde Subaru había sido
acostado estaba en el tercer piso, exactamente a mitad de camino del edificio
de cinco pisos, que aparentemente era una sala de reuniones.
Anastasia: Ya que el piso superior se ha
quemado por el fuego del dragón, el cuarto piso ahora es el piso
superior.
Todas las víctimas de lujuria están reunidas allí.
Subaru: …Si el piso superior se ha quemado,
¿qué pasó con el dispositivo de transmisión?
}
Anastasia: Esta seguro. Fue bajado y
guardado. El dispositivo arcano en sí tiene la forma de una caja de metal que
se puede mover en un soporte. Aparentemente, los sonidos recolectados en la
caja serían recogidos por otros dispositivos instalados en toda la ciudad.
Subaru: ¿Cómo antenas, o más parecidos a
altavoces?
Una caja de metal más altavoces: algo así
como un sistema de audio mágico. El hecho de que hayan recuperado de manera
segura tanto a los rehenes como al dispositivo arcano fue una buena noticia
después de lo sucedido.
Subaru: Dijiste que las víctimas afectadas
están todas reunidas en el cuarto piso, ¿verdad?
Anastasia: A pesar de haberse convertido en
moscas y dragones, aún conservan su conciencia humana. Por lo que nos entienden
y siguen nuestras instrucciones. Aunque no puedo decidir si eso es algo bueno o
malo
Subaru: ---
Que alguien se mantenga consciente después
de todo esto… Subaru no podría decir con seguridad si él podría considerarlo
algo bueno. Conscientemente recordar sus cuerpos y convertirse en una forma de
vida completamente diferente no es algo que la expresión "deprimente"
pueda describir de manera segura. Seguramente, también implicaría la pérdida de
uno mismo.
Perder el cuerpo de uno y continuar como
algo completamente distinto, ¿sería realmente posible no perder también la
identidad de uno? Tal vez, solo aquellos que realmente lo han experimentado
podrían responder esa pregunta.
Anastasia: Todavía pueden mover sus
cuerpos. Así que afortunadamente, nadie se ha matado. Todo sucedió tan rápido,
hay algunos que todavía no han aceptado la situación. ...Me alegraría si
pudiéramos mantenerlos a salvo hasta que todo se resuelva.
Subaru: Eso es...
Anastasia: ¿No crees que sea algo de qué
preocuparse?
Subaru: ――――
No era una pregunta que Subaru pudiera
responder a la ligera. Era solo que, en
comparación con Subaru, Anastasia parecía sentirse mucho más cómoda al
considerar con calma las contramedidas ante estas
circunstancias
extraordinarias.
Anastasia: Hay esperanza mientras estén
vivos. Aunque, incluso mientras el cuerpo vive, si la voluntad muere, la
esperanza también colapsará. Así que mantenerse vivo no es suficiente. También
deben tener la voluntad de vivir y recorrer este duro camino sin importar lo
que vean sus ojos mientras caminan.
Subaru escuchó a Anastasia decir esto sin
ver su rostro. Pero, en términos de su
visión resistente sobre la vida y la muerte, Subaru lo aceptó de todo corazón.
Subaru: Y así debemos resistir, para ese
fin.
???: Anastasia-sama
Abajo, al ver a Subaru y Anastasia
caminando hacia el primer piso, Julius, quien fue el primero en darse cuenta de
su llegada, gritó el nombre de su maestro.
Para Subaru, el vestíbulo de recepción del primer piso era solo un lugar
por el que había pasado brevemente. Pero, incluso para él, las marcas de la
desesperada batalla que había sido grabada en el vestíbulo le causaron una
impresión tan profunda que pudo sentir
vívidamente la feroz lucha que había
tenido lugar aquí.
Los escritorios y sillas, e incluso la
pared estaban llenos de golpes de espada y hechizos mágicos, mientras que, por
todo el suelo, las manchas de sangre raspadas por las huellas afirmaban la
existencia de una lucha.
Aunque lamentablemente, Julius había dejado
escapar a Glotonería, todas estas señales mostraban que no era por no
intentarlo.
Julius: ¿Cómo fue la conversación con Subaru?
Anastasia: Se resistió un poco, pero
terminó bastante bien, supongo. Igual que nosotros, Natsuki-kun también está
lleno de motivación, así que...
Asintiendo juguetonamente a la pregunta de
Julius, Anastasia volvió su mirada hacia la parte trasera de la
habitación. Frente a las escaleras de
las que Subaru y Anastasia acababan de bajar, en la entrada del vestíbulo
estaba Ricardo, que levantaba su gigantesca figura. Justo como lo había
ordenado Anastasia, él había estado afuera tratando de ponerse en contacto con
otros sobrevivientes.
Anastasia: Bienvenido de nuevo, Ricardo.
¿Cómo está la situación afuera?
Ricardo: Me alegro verla en buen estado,
señorita. Sobre los demás refugios me temo que esto se pone cada vez peor.
Probablemente la situación no cambie con el tiempo. Esos bastardos de seguro
que tienen algo de talento para jugar con las personas.
Frunciendo el ceño, disgustado, Ricardo
resopló ante el resultado infructuoso de la búsqueda.
Rasguñó ásperamente su cabeza canina e hizo
un gesto a los miembros del Colmillo de Hierro que lo rodeaban, dando
instrucciones a varios de ellos para que salieran nuevamente mientras les
decían a los demás que descansaran en una esquina.
Subaru: ¿Cómo fue que el Culto de la Bruja
jugó con las personas? No, quiero decir, ya sé que esta situación en la que
estamos es bastante enredada, pero ¿están hablando de otra cosa, ¿verdad?
????: Fue la transmisión capitán. Se trata
sobre las transmisiones de esos cabrones con los que luchamos.
Garfiel respondió la pregunta de Subaru.
Escuchando a Garfiel haciendo sonar sus colmillos
de frustración, Subaru preguntó
Subaru: ¿Emisión? ¿Te refieres a la última
donde transmitieron sus demandas? Aparte de eso, ¿dijeron algo más?
Julius: Nada relevante a primera vista.
Anunció que todas las fuerzas que intentaron recuperar el Ayuntamiento han sido
derrotadas. El Arzobispo del Pecado de la lujuria debe ser quien lo hizo. Sus
palabras fueron verdaderamente despreciables,
Ricardo: Gracias, a ella, las personas en
los pocos refugios a los que fui no tienen ningún espíritu de lucha. No será
fácil convencerlos de que se levanten para recuperar su ciudad.
Julius cerró los ojos con firmeza, mientras
Ricardo arrugaba su nariz. Al escuchar
sus respuestas, Subaru entendió más o menos lo que significaba ese comentario
sobre "jugar con la gente".
Junto con sus demandas, Capella había
anunciado la derrota de las fuerzas de Subaru al ocupar el Ayuntamiento.
Naturalmente, para los ciudadanos que ni siquiera podían levantar una espada,
las noticias de la derrota deben haber destruido sus esperanzas, mientras que
aquellos que sí tenían la fuerza para luchar pronto se darían cuenta de la
importancia del asalto en el Ayuntamiento y la razón por la que Subaru y los
otros se habían comprometido a este ataque tan precipitado.
Al mismo tiempo, se darían cuenta de que
tal asalto requería unas fuerzas considerables y que, aun con tales fuerzas,
habían fracasado. En otras palabras, independientemente de si las personas en
los pocos refugios tenían alguna fuerza para resistir o no, las transmisiones
de Capella estaban destinadas a romper su espíritu.
Ricardo: De los registros del ayuntamiento,
ya conocemos la ubicación de todos los refugios de la ciudad. Pero, aun así,
después de visitar los refugios cercanos uno por uno... bueno, ya puedes
adivinar cuál es el resultado.
Ricardo extendió los brazos y confirmó
directamente los temores de Subaru. Solo era la naturaleza humana. No tenía
sentido culpar a Ricardo por no haberlos convencido. Cuando se trataba de ser
depravados, nadie se podía comparar con los arzobispos del culto de la bruja.
Anastasia: No hay fuerzas para luchar, no
hay valor para resistir. En ese caso, lo que vendrá a continuación será aún más
peligroso.
Además del triste Subaru, Anastasia se tocó
la barbilla, murmurando. Al ver a Subaru levantar la cabeza ante su voz,
Anastasia ladeó la cabeza diciendo: ¿verdad?
Anastasia: "No puedes ganar incluso si
peleas", una vez que una persona cree esto, perderán su voluntad de
pelear. Entonces, ¿qué crees que la gente hará a continuación?
Subaru: caer en la desesperación y sentir
miedo... espera, esa no es la respuesta que buscabas, ¿verdad?
Anastasia: Bueno, sería lindo que se
limiten a contener las rodillas llorando. Pero, no será así. Incluso si
perdieron la voluntad de luchar, no han perdido la voluntad de vivir. En ese
caso, ¿qué opción les queda?
Subaru: No querrás decir que…
Subaru estaba empezando a captar el rumbo
de lo que Anastasia estaba diciendo. Al mismo tiempo, un insoportable disgusto
por las maquinaciones del Culto de la Bruja se alzó dentro de él. Como para
confirmar la conclusión en la mente temblorosa de Subaru, Anastasia dio una
palmada.
Anastasia: Ya se les presentaron las
condiciones para su supervivencia. En la forma de demandas, también. Por lo
tanto, es lógico pensar que habrá algunos que tratarán de satisfacer esas
demandas por desesperación. Los "Espíritus artificiales" y el
propietario de "El Libro de la Sabiduría", incluso los "Amantes
para sacrificio y las parejas" no estarían fuera de discusión, ¿sabes?
Subaru: ¿no hay manera de que la gente
pueda llegar a ese extremo, verdad?
Anastasia: Tal vez no. Tal vez haya quienes
se nieguen a sacrificar a otros solo por su supervivencia. O aquellos que
tratarán de escapar de la ciudad a toda costa... de cualquier manera, el caos
resultante es inevitable.
Una vez que se permite que el pánico
crezca, este precario equilibrio se derrumbará en un instante. Era demasiado
aterrador imaginar lo que harían los arzobispos a esta ciudad una vez que eso
sucediera. Se les otorgaría la máxima autoridad para borrar todo aquello por lo
que todos trabajaron. Como el
interruptor de algún tirano que podría lanzarlo todo a las inundaciones con un
simple toque de su dedo.
Subaru: Entonces, antes de que eso suceda,
tendremos que seguir intentando comunicarnos con ellos ¿verdad?
Anastasia: Eso no es muy realista.
Subaru: ¡Pero en realidad, esa conclusión
es demasiado pesimista!
Cuando todos tengan miedo, el pánico
comenzará a afianzarse. Y cuando eso sucede, la única forma de luchar es dar
esperanza.
Subaru: "Estamos preparando un
contraataque". Si anunciamos eso, al menos podemos darles a todos algo de
esperanza y mantener el pánico a raya, ¿verdad?
Anastasia: Como mínimo, creo que tenemos
que estar preparados por las bajas necesarias una vez que fallen las
conversaciones. No me gusta pensar en ello, pero debemos considerar qué se
necesitará hacer una vez que esas personas se vuelvan irracionales.
Subaru: Espera, Anastasia-san. ¿Por qué
tengo la sensación de que no estamos hablando de las mismas cosas aquí?
Al tener un mal presentimiento sobre a
dónde podría ir Anastasia, Subaru torció los labios. Al ver esto, Anastasia
dejó escapar un suspiro de agotamiento,
Anastasia: la idea de Natsuki-kun de no
permitir ningún sacrificio en absoluto, aunque sea bonita, no tiene base en la
realidad. En el momento en que tomamos decisiones tan grandes desde el
principio, ganar sin dolor ni pérdida ya era imposible. Eso debería ser
evidente por sí mismo.
Subaru: Por primera y segunda vez... eso es
cierto. Pero prepararse para sacrificar a las personas no es lo mismo en
absoluto. Eso no es lo que significa evitar un desastre antes de que suceda,
¿verdad?
Anastasia: Si lo que dijiste puede
llevarnos a la victoria general, estaré de acuerdo contigo. Pero, eso no es
posible. Cuando un barco se hunde, solo los que tengan el coraje de nadar
sobrevivirán. Mientras que los que se quedan dentro y se dejan hundir como
piedras nunca lo lograrán]
Subaru: ――! ¡Ganar o perder es...!
Anastasia: ¡Si perdemos, todos
terminaremos en el fondo del mar! Si no te gusta ganar o perder, ¿entonces
preferirías vivir o morir? Si crees que puedes salvar todo y a todos, entonces
eres demasiado ingenuo, Natsuki-kun.
Anastasia gritó sobre el agitado Subaru.
Justo cuando Subaru estaba a punto de dar un paso hacia ella, Julius intervino
y lo retuvo. Sin embargo, la mirada de Julius no estaba en Subaru, sino en
Anastasia. Como para demostrar que estaba del lado de Subaru, Julius entrecerró
los ojos,
Julius: Anastasia-sama. Entiendo tus
sentimientos. Pero también estoy de acuerdo con Subaru. Suponiendo que sus
preocupaciones estén justificadas, debemos tomar medidas para evitarlo. Pero
lastimar cruelmente a los civiles te causará un gran dolor... y estarías
jugando directamente en las manos del Culto de la Bruja.
Subaru: Julius...
Al oponerse abiertamente a su maestro,
Julius afirmó su ideal de rectitud cuando colocó su apoyo detrás de Subaru.
Además de su sorpresa ante el comentario de Julius, Subaru también se sintió
fortalecido en sus convicciones. Si Julius, la encarnación constante de los
ideales de los Caballeros, estaba de acuerdo con Subaru, entonces no podría
haber nada de malo en lo que Subaru había dicho.
Sin embargo, Anastasia solo dio unas
palmaditas suaves en su bufanda frente a Julius y,
Anastasia: ¿Pensaste que es porque me gusta
que sugerí abandonar a todas esas personas? No es como si pensara que todos en
los refugios se volverían locos y comenzarían disturbios. Al final, es solo una
posibilidad. ¡Pero es una posibilidad que no podemos ignorar!
Julius: Pero…
Anastasia: No soy una niña, ¿me escuchas?
Tenemos que hacer pleno uso de los recursos que tenemos. Absolutamente debemos
contraatacar al Culto de la Bruja. Y haremos todo lo que esté dentro de nuestra
responsabilidad. Pero si extiendes esa responsabilidad a todo, entonces eso es
demasiado, demasiado amplio, solo dañará nuestras posibilidades de hacer lo que
realmente somos capaces de hacer.
Para Julius, quien se estaba mordiendo el
labio con pesar, las palabras de Anastasia fueron frías e implacables. Y
mientras estas iban dirigidas a Julius, también estaba reprendiendo a Subaru
por su desconsideración.
Por supuesto, no había forma de que Subaru
no hubiera entendido lo que Anastasia estaba diciendo. Es una carga pesada
salvar a alguien. Ya es bastante difícil salvar a una persona a la vez. Pero
cuanto más se expande el rango y más crece el número, menos realista se vuelve,
y más probable es que haya un resultado insatisfactorio.
Esta es una aritmética natural que incluso
un niño puede entender. Cuantas más manzanas intentes mantener en tus manos,
más probabilidades hay de que se caigan de tus manos. Sin mencionar la
posibilidad de tropezar, o de que tus brazos cedan y dejen caer todo.
Anastasia: Lo que tenemos que hacer ahora
es discutir cómo ganar. No estar corriendo alrededor de los niños como sus
nanas. ¿Acaso tu título de caballero tan simple que ni siquiera puedes notar la
diferencia?
Julius: ――――
Escuchando a Anastasia decir esto como para
probarlo, Julius cerró los ojos. Pero detrás de él, al ver que sus puños se
cerraban lentamente y su cabeza comenzaba a caer, Subaru se dio cuenta de que
Julius estaba a punto de retirar su objeción.
Sin embargo,
Subaru: Julius, si retrocedes ahora, serás
menos digno de ser un Caballero (St: Wow, esto hasta a mí me sorprendió.)
Anastasia:
…Natsuki-kun, ¿has estado escuchando? Si no, entonces no has cambiado ni
un poco desde el Palacio Real. Después de todo lo que has pasado y siendo
condecorado como un Caballero, esperaba más de ti.
Subaru: Sí. Soy un caballero ahora. Y es
porque soy un caballero que no puedo retroceder. Absolutamente, no puedo.
Cuantas más responsabilidades tengas, más
probabilidades tendrás de abandonarlas. Pero Subaru era un Caballero, y Julius
era un Caballero, y en sus brazos, no sostenían manzanas, sino algo mucho más
precioso. Estas no eran frutas inanimadas que no sentían dolor incluso cuando
se caían, sino algo que podía llorar y sentir indignación: estas eran vidas
humanas.
Subaru: Renunciar desde el principio y
dejar que los prejuicios te superen, bueno, no lo tendré. Lo siento, pero no
soy tan susceptible al sentido común de este mundo.
Anastasia: Estás diciendo algo
incomprensible otra vez…fue lo mismo con la ballena blanca, y lo mismo con el
Culto de la Bruja después aquello. Todas las guerras tienen bajas. Después de
todo eso, ¿también te opondrás a su muerte?
Subaru: No los subestimes, Anastasia. Todos
los que lucharon y murieron en aquel entonces ya habían tomado una decisión.
Cuando alguien muere, es triste, y aunque no quisieron morir, tuvieron la
resolución. Si una persona tiene la resolución de morir o no, es lo que marca
la diferencia.
Sabía que era un argumento conveniente y
que no tenía ninguna lógica. Pero, aun así, el hecho era sólo eso. Colocarse en
una lucha de vida o muerte siempre viene con cierta resolución.
Subaru: La gente de esta ciudad no tenía la
obligación de hacer ese tipo de resolución. Fueron esos bastardos quienes
habían convertido a un lugar hermoso en un campo de batalla. Y nos
equivocaríamos si les permitiéramos decidir qué vendrá después.
Anastasia: Incluso si no te gusta, seguirán
atacando a las personas aun si tienen esa resolución o no. Cuando llegue ese
momento, ¿qué diferencia hay?
Subaru: Hay una diferencia. Es justo para
una persona con esa resolución de luchar contra otra persona con esa
resolución. Ser un Caballero es mantener constantemente la determinación de
proteger a quienes no lo han hecho. Esa es mi definición de Caballero, y eso es
lo que presumí a los niños de la aldea también.
Después de ser condecorado como Caballero y
recibir algunos cumplidos aquí y allá, aquel pensamiento fue algo natural para
Subaru. Y una vez que hizo alarde de
esto a los niños, y vio sus ojos brillantes y aduladores, Subaru estaba
decidido a no decepcionarlos.
Por supuesto, también tuvo algo que ver con
los ojos brillantes de Emilia mientras ella escuchaba a su lado.
Subaru: Soy el caballero de Emilia. Y
quiero pelear por Emilia. Pero eso no significa que solo pueda proteger a
Emilia mientras ignoro a los demás. Anastasia-san, Julius es tu caballero. Él
quiere pelear por ti más que nadie en este mundo. Pero eso no es suficiente.
Estas vanas criaturas llamadas Caballeros son todas codiciosas como el infierno,
ya sabes.
Anastasia: ――――
Subaru: Seguiremos posando hasta el día en
que muramos, Julius también es el mismo. Si preguntas por qué, es porque este
tipo es el "Caballero más perfecto". Lo que significa que este tipo
adora posar más que cualquiera de nosotros.
Dejando a Anastasia aturdida, Subaru le
disparó a Julius un pulgar hacia arriba. Inmediatamente, Julius, que había
estado escuchando, hizo una mueca de consternación. Al ver esta rara expresión
atónita en los rostros de Anastasia y Julius, los labios de Subaru se torcieron
en una sonrisa bastante inapropiada.
Subaru: Es claro y simple por qué estamos
matando a esos bastardos, pero si tenemos que asumir la culpa de abandonar a
alguien para poder hacerlo, entonces es simplemente estúpido. Salvaremos a todos,
así como eliminaremos a esos bastardos. Incluso si terminamos perdiendo por
nuestras convicciones, así es como lo haremos.
Renunciar a una posibilidad desde el
principio no es lo mismo que fallar después de haberlo intentado. No fue
difícil en absoluto ver que todo fue solo autosatisfacción, pero,
???: ――Luchando por la autosatisfacción,
esa debe ser la forma más humana de vivir que existe. Estoy al lado del hermano
en este caso.
Subaru: ――!
Mientras Subaru estaba ocupado tejiendo su
idealismo ingenuo, una voz completamente nueva se mezcló en la conversación.
Sorprendidos por la adición de esa voz, las
caras de todos se giraron simultáneamente hacia la entrada del vestíbulo. De
pie allí, la persona en el fuego cruzado de las miradas de todos se encogió de
hombros incómodamente,
???: oi oi, si todos seguís disparando con
esa mirada sudorosa, me sentiré preocupado, ya sabes. Sé que no hay mucho que
ver. Así que me temo que realmente no cumpliré sus expectativas
Subaru: ――Al
Usando sus bromas y sus gestos para
demostrar que no quiere hacer daño, aquel era un hombre que llevaba un casco
negro azabache, uno de sus amigos más cercanos. Era uno de los muchos conocidos
que habían desaparecido desde su partida en la posada esta mañana: Al.
Poniéndose su ropa habitual y su aire
habitual, Al miró alrededor de la habitación,
Al: ¿Acaso son todas esas caras viejas la
únicas en el Ayuntamiento? ¿Pensé que habrían más?
Subaru: Están con Crusch-san arriba… Más
importante, ¿dónde has estado?]
Al: ¿Yo? Oh sí, corrí como el infierno y
encontré un rincón para esconderme en el momento en que comenzaron los
problemas. Salí para echar un vistazo una vez que vi que la situación se había
calmado un poco. Luego escuché la transmisión y corrí al Ayuntamiento con la
esperanza de encontrar una explicación o a alguien que sepa lo que está
pasando aquí.
Presumiendo su asombroso optimismo
despreocupado y feliz, Al respondió mientras hacía chirridos metálicos con su
casco. Escuchando esto, incluso los otros no pudieron evitar dejarse desanimar
por su respuesta. Fue el tipo de desdén hacia alguien que eligió salvar su
propia piel a pesar de que sus amigos estaban muy necesitados.
Al: Oye, no me mires así. ¿No fue mi culpa
que llegara tarde? Quiero decir, lo siento por no estar allí, pero eso fue
totalmente un caso de mala suerte, ¿sabes? Además, dudo que un chico más como
yo hubiera hecho una diferencia.
Garfiel: Hey, capitán, ¿qué pasa con este
tipo? ¿Nos está jodiendo?
Ver a Al decirlo con un encogimiento de
hombros, Garfiel, quien había estado molesto desde el principio, se estaba
acercando a su límite. Ahora que lo pienso, Garfiel y Al nunca se conocieron.
Cuando Priscilla apareció en la posada y destrozó el ambiente amistoso de
todos, Garfiel tampoco estaba allí. Así que, a sus ojos, Al debe haber sido un
hombre extraño que acaba de aparecer de la nada.
Subaru: Espera espera, Garfiel. Ese tipo es
Al. Es el Caballero de Priscilla, la candidata de la Selección Real. Todavía no
te lo he dicho, pero los cinco candidatos están reunidos en la ciudad en este
momento, y…
Al: Corrección, hermano. Solo soy un lacayo
de la Princesa-san, no caballero. No quisiera quedarme atrapado con un título
tan tenso como ese. Oh, no te ofendas, hermano.
Mientras Subaru estaba buscando formas para
detener a Garfiel, Al lo corrigió con un golpe sarcástico. Ver esa actitud solo
hizo que Garfiel apretara sus colmillos mientras que las venas azules salían de
su frente.
Anastasia: ¡Muy bien, eso es suficiente!
¡Eso es suficiente! ¿¡Se está volviendo cada vez más confuso, así que todos
ustedes pueden callarse!?
Antes de que sus bromas puedan escalar más,
Anastasia aplaudió para devolver el estado de ánimo. Luego, con sus ojos
redondos miro directamente a Al,
Anastasia: Apareciendo de repente y
entrando directamente a alterar la atmósfera, eres como tu maestra, ¿verdad?
Hacer alarde de tus defectos de personalidad solo hará que las personas se
enojen contigo. Así que solo detente.
Al: Auch… la verdad puede doler un poco, ya
sabes. Pero, estas muy mal, así es como soy. La gente siempre me dice que los
pongo nerviosos. Supongo que arruinar el ritmo de la gente también puede ser
una técnica de supervivencia.
Pasando el dedo por la brecha entre el
casco y el cuello, Al dijo aquello mientras se rascaba la parte posterior de la
cabeza. Al encontrarse con su refutación en un suspiro, Anastasia se volvió
hacia Subaru,
Anastasia: Las cosas se han vuelto más
complicadas, pero mi posición no va a cambiar. Tenemos que aceptar la premisa
de que habrá que hacer sacrificios y, desde allí, podemos comenzar a planear
hacia la victoria. Si no quieres que haya víctimas civiles, Natsuki-kun,
entonces comienza a pensar en cómo vas a lograrlo. Aunque digo esto, tampoco quiero
ver más muertes.
Subaru: Entonces, no te importará si voy a
revisar los refugios, ¿verdad?
[Anastasia: Eres libre de usar tu tiempo
como quieras De cualquier manera, nuestra necesidad de reforzar nuestras
fuerzas no ha cambiado. Si encuentra a alguien en los refugios que pueda
pelear, pídele que te acompañe.
Aunque reticente, Anastasia retiró su
oposición a Subaru. Tenerla totalmente de acuerdo simplemente sería demasiado
esperar. Así que, debía tomar esto como el mejor resultado.
[Anastasia: Llévate el Espejo de
Comunicación contigo. Nos pondremos en contacto, pero por ahora, fijemos la
fecha límite para reunirnos dentro de seis horas. Ten cuidado, no debemos
cometer errores a partir de ahora]
Subaru: Fecha límite, eh... olvidé
preguntar, pero, ¿qué hora es?
Julius: todavía es el mismo día, apenas se
acerca la medianoche. "Contando a partir de ahora, solo tenemos
nueve
horas”
Julius le dijo el límite de tiempo en lugar
de Anastasia.
Si celebran la próxima reunión de
estrategia en seis horas, en la práctica, solo tendrá tres horas de uso
gratuito como desea. Tendría que encontrar una manera de convencer a Anastasia
dentro de ese plazo. Luego, tendrían que encontrar la mano de obra y el plan
necesario para derrotar al Culto de la bruja y destruirlos antes de que se
agote el tiempo. Sólo entonces, se salvaría la ciudad. O, mejor dicho, eso solo
no es suficiente.
Tendrá que recuperar a Emilia. Recuperar
los recuerdos de Rem de la gula. Restaurar a las personas transformadas por la
lujuria a sus formas normales. Y solo entonces, su victoria sería completa. (ya
fue xd)
Subaru: No tenemos mucho tiempo. ¿Tienes un
mapa de los refugios?
Anastasia: Sí. Toma tantas copias como
necesites. Hemos marcado los lugares donde Ricardo y los niños del Colmillo de
Hierro ya han visitado, y los que se están revisando ahora.
Anastasia hizo un gesto a Ricardo, quien le
entregó a Subaru el mapa de su ruta. Desde las marcas sobre el nuevo mapa,
Subaru pudo ver que el Colmillo de Hierro había comenzado desde los refugios
más lejanos y se había dirigido hacia el centro. Teniendo en cuenta el estado
de la pierna de Subaru, fue una gran ayuda que solo quedaran las ubicaciones
más cercanas.
Era casi como si hubieran pensado en esto
de antemano y hubieran dejado esto para él a propósito.
Julius: Subaru, iré contigo.
Subaru: Julius... no, será mejor que no. Si
bien sería bueno tener más personas a la mano, sería un problema si no dejamos
suficiente fuerza de combate en el Ayuntamiento.
Subaru rechazó la oferta de Julius porque
dejaría al Ayuntamiento demasiado vulnerable. Ricardo volvería a patrullar, y
Subaru ya tenía la intención de llevar a Garfiel con él. A pesar de que Wilhelm
todavía estaba arriba, sería una carga demasiado pesada dejarle solo la
protección del Ayuntamiento.
Además, ya había una nube oscura sobre el
campamento de Crusch en este momento. Al escuchar la respuesta de Subaru,
Julius asintió con pesar. Siempre había sido raro verlo perder su compostura de
esta manera. Subaru le dio unas palmaditas a Julius en el hombro y levantó la
barbilla hacia Garfiel.
Subaru: Garfiel vendrá conmigo. Y veremos
si podemos encontrar más combatientes en los refugios. Intentaremos calmar a
las personas mientras hacemos eso.
Garfiel: Sí, sí, lo tengo. Déjamelo a mí.
Un poco tarde para notar la invitación de
Subaru, Garfiel rápidamente se sostuvo la barbilla y asintió. Al obtener esta
confirmación, Subaru extendió el mapa en sus manos y, con el Ayuntamiento en el
centro, comenzó a preguntarse con qué lado de Priestella debería comenzar. Su
primera prioridad debe ser asegurar su fuerza de combate, es decir, debia
averiguar qué le sucedió a Reinhardt.
Al: Si es posible, ¿podemos mirar primero
en los refugios cerca de la posada? Creo que Princess-san no pudo haberse alejado
mucho de allí
Subaru: En ese caso, estará más cerca si
pasamos por ahí... espera un minuto.
Con su dedo en el mapa, Subaru se detuvo de
repente para mirar a Al, que se había abierto camino en la conversación. Al ver
a Al inclinar su cabeza con aire confundido, Subaru lo señaló con el dedo y,
Subaru: ¿Tú... también vienes?
Al: ¿Sí? Estaré un poco preocupado si tengo
que ir solo. Y estaré aún más preocupado si no encuentro a Princess-san.
Después de todo lo que ha sucedido, no vas a hacerme vagar por mi cuenta,
¿verdad? Con las cosas como están, tengo miedo de que algo suceda si no la
encontramos pronto.
Garfiel: Así que solo el amor perfecto de
sirviente a su maestro, ¿verdad?
Tan improductivo como era este sentimiento,
Subaru estaba realmente contento de que una persona más se uniera a él. Al oír
que Al iría con ellos, Garfiel hizo una expresión de disgusto, pero, en este
punto, estaba listo para dejar de lado sus dudas por ahora. Por mucho que les
molestara, no había duda de que quería salvar a Priscilla.
Subaru: En cuanto a Priscilla... la vi en
el parque de la primera calle unos quince minutos antes de que empezara el
caos. En ese caso, ella probablemente estará en un refugio cercano.
Al: ¿En serio? ¡Esa es una información
importantísima, hermano! ¡Comencemos desde allí!
Lleno de alegría por la nueva información,
Al golpeó violentamente la espalda de Subaru. Y así, acompañados por un alegre
Al y un ceñudo Garfiel, los tres abandonaron el Ayuntamiento en su expedición a
los refugios. Todo el tiempo, mirándolos por detrás mientras se fueron.
Bufanda: Parece que nos hemos convertido en
los chicos malos...
Anastasia: Shush, bufanda-zorro. Y no es
como si no lo hubiera pensado. Pero si Natsuki-kun puede decir lo mismo cuando
regrese, entonces él no es capaz de pensar en nada.
Con una expresión de cansancio en su
rostro, susurró Anastasia, mientras la bufanda suavemente se estremeció. Y
nadie más notaría este breve intercambio entre ellos.
Después de la conversación en la que
renovaron su resolución, Subaru y Anastasia bajaron las escaleras del
Ayuntamiento.
La gran sala donde Subaru había sido
acostado estaba en el tercer piso, exactamente a mitad de camino del edificio
de cinco pisos, que aparentemente era una sala de reuniones.
Anastasia: Ya que el piso superior se ha
quemado por el fuego del dragón, el cuarto piso ahora es el piso
superior.
Todas las víctimas de lujuria están reunidas allí.
Subaru: …Si el piso superior se ha quemado,
¿qué pasó con el dispositivo de transmisión?
}
Anastasia: Esta seguro. Fue bajado y
guardado. El dispositivo arcano en sí tiene la forma de una caja de metal que
se puede mover en un soporte. Aparentemente, los sonidos recolectados en la
caja serían recogidos por otros dispositivos instalados en toda la ciudad.
Subaru: ¿Cómo antenas, o más parecidos a
altavoces?
Una caja de metal más altavoces: algo así
como un sistema de audio mágico. El hecho de que hayan recuperado de manera
segura tanto a los rehenes como al dispositivo arcano fue una buena noticia
después de lo sucedido.
Subaru: Dijiste que las víctimas afectadas
están todas reunidas en el cuarto piso, ¿verdad?
Anastasia: A pesar de haberse convertido en
moscas y dragones, aún conservan su conciencia humana. Por lo que nos entienden
y siguen nuestras instrucciones. Aunque no puedo decidir si eso es algo bueno o
malo
Subaru: ---
Que alguien se mantenga consciente después
de todo esto… Subaru no podría decir con seguridad si él podría considerarlo
algo bueno. Conscientemente recordar sus cuerpos y convertirse en una forma de
vida completamente diferente no es algo que la expresión "deprimente"
pueda describir de manera segura. Seguramente, también implicaría la pérdida de
uno mismo.
Perder el cuerpo de uno y continuar como
algo completamente distinto, ¿sería realmente posible no perder también la
identidad de uno? Tal vez, solo aquellos que realmente lo han experimentado
podrían responder esa pregunta.
Anastasia: Todavía pueden mover sus
cuerpos. Así que afortunadamente, nadie se ha matado. Todo sucedió tan rápido,
hay algunos que todavía no han aceptado la situación. ...Me alegraría si
pudiéramos mantenerlos a salvo hasta que todo se resuelva.
Subaru: Eso es...
Anastasia: ¿No crees que sea algo de qué
preocuparse?
Subaru: ――――
No era una pregunta que Subaru pudiera
responder a la ligera. Era solo que, en
comparación con Subaru, Anastasia parecía sentirse mucho más cómoda al
considerar con calma las contramedidas ante estas
circunstancias
extraordinarias.
Anastasia: Hay esperanza mientras estén
vivos. Aunque, incluso mientras el cuerpo vive, si la voluntad muere, la
esperanza también colapsará. Así que mantenerse vivo no es suficiente. También
deben tener la voluntad de vivir y recorrer este duro camino sin importar lo
que vean sus ojos mientras caminan.
Subaru escuchó a Anastasia decir esto sin
ver su rostro. Pero, en términos de su
visión resistente sobre la vida y la muerte, Subaru lo aceptó de todo corazón.
Subaru: Y así debemos resistir, para ese
fin.
???: Anastasia-sama
Abajo, al ver a Subaru y Anastasia
caminando hacia el primer piso, Julius, quien fue el primero en darse cuenta de
su llegada, gritó el nombre de su maestro.
Para Subaru, el vestíbulo de recepción del primer piso era solo un lugar
por el que había pasado brevemente. Pero, incluso para él, las marcas de la
desesperada batalla que había sido grabada en el vestíbulo le causaron una
impresión tan profunda que pudo sentir
vívidamente la feroz lucha que había
tenido lugar aquí.
Los escritorios y sillas, e incluso la
pared estaban llenos de golpes de espada y hechizos mágicos, mientras que, por
todo el suelo, las manchas de sangre raspadas por las huellas afirmaban la
existencia de una lucha.
Aunque lamentablemente, Julius había dejado
escapar a Glotonería, todas estas señales mostraban que no era por no
intentarlo.
Julius: ¿Cómo fue la conversación con Subaru?
Anastasia: Se resistió un poco, pero
terminó bastante bien, supongo. Igual que nosotros, Natsuki-kun también está
lleno de motivación, así que...
Asintiendo juguetonamente a la pregunta de
Julius, Anastasia volvió su mirada hacia la parte trasera de la
habitación. Frente a las escaleras de
las que Subaru y Anastasia acababan de bajar, en la entrada del vestíbulo
estaba Ricardo, que levantaba su gigantesca figura. Justo como lo había
ordenado Anastasia, él había estado afuera tratando de ponerse en contacto con
otros sobrevivientes.
Anastasia: Bienvenido de nuevo, Ricardo.
¿Cómo está la situación afuera?
Ricardo: Me alegro verla en buen estado,
señorita. Sobre los demás refugios me temo que esto se pone cada vez peor.
Probablemente la situación no cambie con el tiempo. Esos bastardos de seguro
que tienen algo de talento para jugar con las personas.
Frunciendo el ceño, disgustado, Ricardo
resopló ante el resultado infructuoso de la búsqueda.
Rasguñó ásperamente su cabeza canina e hizo
un gesto a los miembros del Colmillo de Hierro que lo rodeaban, dando
instrucciones a varios de ellos para que salieran nuevamente mientras les
decían a los demás que descansaran en una esquina.
Subaru: ¿Cómo fue que el Culto de la Bruja
jugó con las personas? No, quiero decir, ya sé que esta situación en la que
estamos es bastante enredada, pero ¿están hablando de otra cosa, ¿verdad?
????: Fue la transmisión capitán. Se trata
sobre las transmisiones de esos cabrones con los que luchamos.
Garfiel respondió la pregunta de Subaru.
Escuchando a Garfiel haciendo sonar sus colmillos
de frustración, Subaru preguntó
Subaru: ¿Emisión? ¿Te refieres a la última
donde transmitieron sus demandas? Aparte de eso, ¿dijeron algo más?
Julius: Nada relevante a primera vista.
Anunció que todas las fuerzas que intentaron recuperar el Ayuntamiento han sido
derrotadas. El Arzobispo del Pecado de la lujuria debe ser quien lo hizo. Sus
palabras fueron verdaderamente despreciables,
Ricardo: Gracias, a ella, las personas en
los pocos refugios a los que fui no tienen ningún espíritu de lucha. No será
fácil convencerlos de que se levanten para recuperar su ciudad.
Julius cerró los ojos con firmeza, mientras
Ricardo arrugaba su nariz. Al escuchar
sus respuestas, Subaru entendió más o menos lo que significaba ese comentario
sobre "jugar con la gente".
Junto con sus demandas, Capella había
anunciado la derrota de las fuerzas de Subaru al ocupar el Ayuntamiento.
Naturalmente, para los ciudadanos que ni siquiera podían levantar una espada,
las noticias de la derrota deben haber destruido sus esperanzas, mientras que
aquellos que sí tenían la fuerza para luchar pronto se darían cuenta de la
importancia del asalto en el Ayuntamiento y la razón por la que Subaru y los
otros se habían comprometido a este ataque tan precipitado.
Al mismo tiempo, se darían cuenta de que
tal asalto requería unas fuerzas considerables y que, aun con tales fuerzas,
habían fracasado. En otras palabras, independientemente de si las personas en
los pocos refugios tenían alguna fuerza para resistir o no, las transmisiones
de Capella estaban destinadas a romper su espíritu.
Ricardo: De los registros del ayuntamiento,
ya conocemos la ubicación de todos los refugios de la ciudad. Pero, aun así,
después de visitar los refugios cercanos uno por uno... bueno, ya puedes
adivinar cuál es el resultado.
Ricardo extendió los brazos y confirmó
directamente los temores de Subaru. Solo era la naturaleza humana. No tenía
sentido culpar a Ricardo por no haberlos convencido. Cuando se trataba de ser
depravados, nadie se podía comparar con los arzobispos del culto de la bruja.
Anastasia: No hay fuerzas para luchar, no
hay valor para resistir. En ese caso, lo que vendrá a continuación será aún más
peligroso.
Además del triste Subaru, Anastasia se tocó
la barbilla, murmurando. Al ver a Subaru levantar la cabeza ante su voz,
Anastasia ladeó la cabeza diciendo: ¿verdad?
Anastasia: "No puedes ganar incluso si
peleas", una vez que una persona cree esto, perderán su voluntad de
pelear. Entonces, ¿qué crees que la gente hará a continuación?
Subaru: caer en la desesperación y sentir
miedo... espera, esa no es la respuesta que buscabas, ¿verdad?
Anastasia: Bueno, sería lindo que se
limiten a contener las rodillas llorando. Pero, no será así. Incluso si
perdieron la voluntad de luchar, no han perdido la voluntad de vivir. En ese
caso, ¿qué opción les queda?
Subaru: No querrás decir que…
Subaru estaba empezando a captar el rumbo
de lo que Anastasia estaba diciendo. Al mismo tiempo, un insoportable disgusto
por las maquinaciones del Culto de la Bruja se alzó dentro de él. Como para
confirmar la conclusión en la mente temblorosa de Subaru, Anastasia dio una
palmada.
Anastasia: Ya se les presentaron las
condiciones para su supervivencia. En la forma de demandas, también. Por lo
tanto, es lógico pensar que habrá algunos que tratarán de satisfacer esas
demandas por desesperación. Los "Espíritus artificiales" y el
propietario de "El Libro de la Sabiduría", incluso los "Amantes
para sacrificio y las parejas" no estarían fuera de discusión, ¿sabes?
Subaru: ¿no hay manera de que la gente
pueda llegar a ese extremo, verdad?
Anastasia: Tal vez no. Tal vez haya quienes
se nieguen a sacrificar a otros solo por su supervivencia. O aquellos que
tratarán de escapar de la ciudad a toda costa... de cualquier manera, el caos
resultante es inevitable.
Una vez que se permite que el pánico
crezca, este precario equilibrio se derrumbará en un instante. Era demasiado
aterrador imaginar lo que harían los arzobispos a esta ciudad una vez que eso
sucediera. Se les otorgaría la máxima autoridad para borrar todo aquello por lo
que todos trabajaron. Como el
interruptor de algún tirano que podría lanzarlo todo a las inundaciones con un
simple toque de su dedo.
Subaru: Entonces, antes de que eso suceda,
tendremos que seguir intentando comunicarnos con ellos ¿verdad?
Anastasia: Eso no es muy realista.
Subaru: ¡Pero en realidad, esa conclusión
es demasiado pesimista!
Cuando todos tengan miedo, el pánico
comenzará a afianzarse. Y cuando eso sucede, la única forma de luchar es dar
esperanza.
Subaru: "Estamos preparando un
contraataque". Si anunciamos eso, al menos podemos darles a todos algo de
esperanza y mantener el pánico a raya, ¿verdad?
Anastasia: Como mínimo, creo que tenemos
que estar preparados por las bajas necesarias una vez que fallen las
conversaciones. No me gusta pensar en ello, pero debemos considerar qué se
necesitará hacer una vez que esas personas se vuelvan irracionales.
Subaru: Espera, Anastasia-san. ¿Por qué
tengo la sensación de que no estamos hablando de las mismas cosas aquí?
Al tener un mal presentimiento sobre a
dónde podría ir Anastasia, Subaru torció los labios. Al ver esto, Anastasia
dejó escapar un suspiro de agotamiento,
Anastasia: la idea de Natsuki-kun de no
permitir ningún sacrificio en absoluto, aunque sea bonita, no tiene base en la
realidad. En el momento en que tomamos decisiones tan grandes desde el
principio, ganar sin dolor ni pérdida ya era imposible. Eso debería ser
evidente por sí mismo.
Subaru: Por primera y segunda vez... eso es
cierto. Pero prepararse para sacrificar a las personas no es lo mismo en
absoluto. Eso no es lo que significa evitar un desastre antes de que suceda,
¿verdad?
Anastasia: Si lo que dijiste puede
llevarnos a la victoria general, estaré de acuerdo contigo. Pero, eso no es
posible. Cuando un barco se hunde, solo los que tengan el coraje de nadar
sobrevivirán. Mientras que los que se quedan dentro y se dejan hundir como
piedras nunca lo lograrán]
Subaru: ――! ¡Ganar o perder es...!
Anastasia: ¡Si perdemos, todos
terminaremos en el fondo del mar! Si no te gusta ganar o perder, ¿entonces
preferirías vivir o morir? Si crees que puedes salvar todo y a todos, entonces
eres demasiado ingenuo, Natsuki-kun.
Anastasia gritó sobre el agitado Subaru.
Justo cuando Subaru estaba a punto de dar un paso hacia ella, Julius intervino
y lo retuvo. Sin embargo, la mirada de Julius no estaba en Subaru, sino en
Anastasia. Como para demostrar que estaba del lado de Subaru, Julius entrecerró
los ojos,
Julius: Anastasia-sama. Entiendo tus
sentimientos. Pero también estoy de acuerdo con Subaru. Suponiendo que sus
preocupaciones estén justificadas, debemos tomar medidas para evitarlo. Pero
lastimar cruelmente a los civiles te causará un gran dolor... y estarías
jugando directamente en las manos del Culto de la Bruja.
Subaru: Julius...
Al oponerse abiertamente a su maestro,
Julius afirmó su ideal de rectitud cuando colocó su apoyo detrás de Subaru.
Además de su sorpresa ante el comentario de Julius, Subaru también se sintió
fortalecido en sus convicciones. Si Julius, la encarnación constante de los
ideales de los Caballeros, estaba de acuerdo con Subaru, entonces no podría
haber nada de malo en lo que Subaru había dicho.
Sin embargo, Anastasia solo dio unas
palmaditas suaves en su bufanda frente a Julius y,
Anastasia: ¿Pensaste que es porque me gusta
que sugerí abandonar a todas esas personas? No es como si pensara que todos en
los refugios se volverían locos y comenzarían disturbios. Al final, es solo una
posibilidad. ¡Pero es una posibilidad que no podemos ignorar!
Julius: Pero…
Anastasia: No soy una niña, ¿me escuchas?
Tenemos que hacer pleno uso de los recursos que tenemos. Absolutamente debemos
contraatacar al Culto de la Bruja. Y haremos todo lo que esté dentro de nuestra
responsabilidad. Pero si extiendes esa responsabilidad a todo, entonces eso es
demasiado, demasiado amplio, solo dañará nuestras posibilidades de hacer lo que
realmente somos capaces de hacer.
Para Julius, quien se estaba mordiendo el
labio con pesar, las palabras de Anastasia fueron frías e implacables. Y
mientras estas iban dirigidas a Julius, también estaba reprendiendo a Subaru
por su desconsideración.
Por supuesto, no había forma de que Subaru
no hubiera entendido lo que Anastasia estaba diciendo. Es una carga pesada
salvar a alguien. Ya es bastante difícil salvar a una persona a la vez. Pero
cuanto más se expande el rango y más crece el número, menos realista se vuelve,
y más probable es que haya un resultado insatisfactorio.
Esta es una aritmética natural que incluso
un niño puede entender. Cuantas más manzanas intentes mantener en tus manos,
más probabilidades hay de que se caigan de tus manos. Sin mencionar la
posibilidad de tropezar, o de que tus brazos cedan y dejen caer todo.
Anastasia: Lo que tenemos que hacer ahora
es discutir cómo ganar. No estar corriendo alrededor de los niños como sus
nanas. ¿Acaso tu título de caballero tan simple que ni siquiera puedes notar la
diferencia?
Julius: ――――
Escuchando a Anastasia decir esto como para
probarlo, Julius cerró los ojos. Pero detrás de él, al ver que sus puños se
cerraban lentamente y su cabeza comenzaba a caer, Subaru se dio cuenta de que
Julius estaba a punto de retirar su objeción.
Sin embargo,
Subaru: Julius, si retrocedes ahora, serás
menos digno de ser un Caballero (St: Wow, esto hasta a mí me sorprendió.)
Anastasia:
…Natsuki-kun, ¿has estado escuchando? Si no, entonces no has cambiado ni
un poco desde el Palacio Real. Después de todo lo que has pasado y siendo
condecorado como un Caballero, esperaba más de ti.
Subaru: Sí. Soy un caballero ahora. Y es
porque soy un caballero que no puedo retroceder. Absolutamente, no puedo.
Cuantas más responsabilidades tengas, más
probabilidades tendrás de abandonarlas. Pero Subaru era un Caballero, y Julius
era un Caballero, y en sus brazos, no sostenían manzanas, sino algo mucho más
precioso. Estas no eran frutas inanimadas que no sentían dolor incluso cuando
se caían, sino algo que podía llorar y sentir indignación: estas eran vidas
humanas.
Subaru: Renunciar desde el principio y
dejar que los prejuicios te superen, bueno, no lo tendré. Lo siento, pero no
soy tan susceptible al sentido común de este mundo.
Anastasia: Estás diciendo algo
incomprensible otra vez…fue lo mismo con la ballena blanca, y lo mismo con el
Culto de la Bruja después aquello. Todas las guerras tienen bajas. Después de
todo eso, ¿también te opondrás a su muerte?
Subaru: No los subestimes, Anastasia. Todos
los que lucharon y murieron en aquel entonces ya habían tomado una decisión.
Cuando alguien muere, es triste, y aunque no quisieron morir, tuvieron la
resolución. Si una persona tiene la resolución de morir o no, es lo que marca
la diferencia.
Sabía que era un argumento conveniente y
que no tenía ninguna lógica. Pero, aun así, el hecho era sólo eso. Colocarse en
una lucha de vida o muerte siempre viene con cierta resolución.
Subaru: La gente de esta ciudad no tenía la
obligación de hacer ese tipo de resolución. Fueron esos bastardos quienes
habían convertido a un lugar hermoso en un campo de batalla. Y nos
equivocaríamos si les permitiéramos decidir qué vendrá después.
Anastasia: Incluso si no te gusta, seguirán
atacando a las personas aun si tienen esa resolución o no. Cuando llegue ese
momento, ¿qué diferencia hay?
Subaru: Hay una diferencia. Es justo para
una persona con esa resolución de luchar contra otra persona con esa
resolución. Ser un Caballero es mantener constantemente la determinación de
proteger a quienes no lo han hecho. Esa es mi definición de Caballero, y eso es
lo que presumí a los niños de la aldea también.
Después de ser condecorado como Caballero y
recibir algunos cumplidos aquí y allá, aquel pensamiento fue algo natural para
Subaru. Y una vez que hizo alarde de
esto a los niños, y vio sus ojos brillantes y aduladores, Subaru estaba
decidido a no decepcionarlos.
Por supuesto, también tuvo algo que ver con
los ojos brillantes de Emilia mientras ella escuchaba a su lado.
Subaru: Soy el caballero de Emilia. Y
quiero pelear por Emilia. Pero eso no significa que solo pueda proteger a
Emilia mientras ignoro a los demás. Anastasia-san, Julius es tu caballero. Él
quiere pelear por ti más que nadie en este mundo. Pero eso no es suficiente.
Estas vanas criaturas llamadas Caballeros son todas codiciosas como el infierno,
ya sabes.
Anastasia: ――――
Subaru: Seguiremos posando hasta el día en
que muramos, Julius también es el mismo. Si preguntas por qué, es porque este
tipo es el "Caballero más perfecto". Lo que significa que este tipo
adora posar más que cualquiera de nosotros.
Dejando a Anastasia aturdida, Subaru le
disparó a Julius un pulgar hacia arriba. Inmediatamente, Julius, que había
estado escuchando, hizo una mueca de consternación. Al ver esta rara expresión
atónita en los rostros de Anastasia y Julius, los labios de Subaru se torcieron
en una sonrisa bastante inapropiada.
Subaru: Es claro y simple por qué estamos
matando a esos bastardos, pero si tenemos que asumir la culpa de abandonar a
alguien para poder hacerlo, entonces es simplemente estúpido. Salvaremos a todos,
así como eliminaremos a esos bastardos. Incluso si terminamos perdiendo por
nuestras convicciones, así es como lo haremos.
Renunciar a una posibilidad desde el
principio no es lo mismo que fallar después de haberlo intentado. No fue
difícil en absoluto ver que todo fue solo autosatisfacción, pero,
???: ――Luchando por la autosatisfacción,
esa debe ser la forma más humana de vivir que existe. Estoy al lado del hermano
en este caso.
Subaru: ――!
Mientras Subaru estaba ocupado tejiendo su
idealismo ingenuo, una voz completamente nueva se mezcló en la conversación.
Sorprendidos por la adición de esa voz, las
caras de todos se giraron simultáneamente hacia la entrada del vestíbulo. De
pie allí, la persona en el fuego cruzado de las miradas de todos se encogió de
hombros incómodamente,
???: oi oi, si todos seguís disparando con
esa mirada sudorosa, me sentiré preocupado, ya sabes. Sé que no hay mucho que
ver. Así que me temo que realmente no cumpliré sus expectativas
Subaru: ――Al
Usando sus bromas y sus gestos para
demostrar que no quiere hacer daño, aquel era un hombre que llevaba un casco
negro azabache, uno de sus amigos más cercanos. Era uno de los muchos conocidos
que habían desaparecido desde su partida en la posada esta mañana: Al.
Poniéndose su ropa habitual y su aire
habitual, Al miró alrededor de la habitación,
Al: ¿Acaso son todas esas caras viejas la
únicas en el Ayuntamiento? ¿Pensé que habrían más?
Subaru: Están con Crusch-san arriba… Más
importante, ¿dónde has estado?]
Al: ¿Yo? Oh sí, corrí como el infierno y
encontré un rincón para esconderme en el momento en que comenzaron los
problemas. Salí para echar un vistazo una vez que vi que la situación se había
calmado un poco. Luego escuché la transmisión y corrí al Ayuntamiento con la
esperanza de encontrar una explicación o a alguien que sepa lo que está
pasando aquí.
Presumiendo su asombroso optimismo
despreocupado y feliz, Al respondió mientras hacía chirridos metálicos con su
casco. Escuchando esto, incluso los otros no pudieron evitar dejarse desanimar
por su respuesta. Fue el tipo de desdén hacia alguien que eligió salvar su
propia piel a pesar de que sus amigos estaban muy necesitados.
Al: Oye, no me mires así. ¿No fue mi culpa
que llegara tarde? Quiero decir, lo siento por no estar allí, pero eso fue
totalmente un caso de mala suerte, ¿sabes? Además, dudo que un chico más como
yo hubiera hecho una diferencia.
Garfiel: Hey, capitán, ¿qué pasa con este
tipo? ¿Nos está jodiendo?
Ver a Al decirlo con un encogimiento de
hombros, Garfiel, quien había estado molesto desde el principio, se estaba
acercando a su límite. Ahora que lo pienso, Garfiel y Al nunca se conocieron.
Cuando Priscilla apareció en la posada y destrozó el ambiente amistoso de
todos, Garfiel tampoco estaba allí. Así que, a sus ojos, Al debe haber sido un
hombre extraño que acaba de aparecer de la nada.
Subaru: Espera espera, Garfiel. Ese tipo es
Al. Es el Caballero de Priscilla, la candidata de la Selección Real. Todavía no
te lo he dicho, pero los cinco candidatos están reunidos en la ciudad en este
momento, y…
Al: Corrección, hermano. Solo soy un lacayo
de la Princesa-san, no caballero. No quisiera quedarme atrapado con un título
tan tenso como ese. Oh, no te ofendas, hermano.
Mientras Subaru estaba buscando formas para
detener a Garfiel, Al lo corrigió con un golpe sarcástico. Ver esa actitud solo
hizo que Garfiel apretara sus colmillos mientras que las venas azules salían de
su frente.
Anastasia: ¡Muy bien, eso es suficiente!
¡Eso es suficiente! ¿¡Se está volviendo cada vez más confuso, así que todos
ustedes pueden callarse!?
Antes de que sus bromas puedan escalar más,
Anastasia aplaudió para devolver el estado de ánimo. Luego, con sus ojos
redondos miro directamente a Al,
Anastasia: Apareciendo de repente y
entrando directamente a alterar la atmósfera, eres como tu maestra, ¿verdad?
Hacer alarde de tus defectos de personalidad solo hará que las personas se
enojen contigo. Así que solo detente.
Al: Auch… la verdad puede doler un poco, ya
sabes. Pero, estas muy mal, así es como soy. La gente siempre me dice que los
pongo nerviosos. Supongo que arruinar el ritmo de la gente también puede ser
una técnica de supervivencia.
Pasando el dedo por la brecha entre el
casco y el cuello, Al dijo aquello mientras se rascaba la parte posterior de la
cabeza. Al encontrarse con su refutación en un suspiro, Anastasia se volvió
hacia Subaru,
Anastasia: Las cosas se han vuelto más
complicadas, pero mi posición no va a cambiar. Tenemos que aceptar la premisa
de que habrá que hacer sacrificios y, desde allí, podemos comenzar a planear
hacia la victoria. Si no quieres que haya víctimas civiles, Natsuki-kun,
entonces comienza a pensar en cómo vas a lograrlo. Aunque digo esto, tampoco quiero
ver más muertes.
Subaru: Entonces, no te importará si voy a
revisar los refugios, ¿verdad?
[Anastasia: Eres libre de usar tu tiempo
como quieras De cualquier manera, nuestra necesidad de reforzar nuestras
fuerzas no ha cambiado. Si encuentra a alguien en los refugios que pueda
pelear, pídele que te acompañe.
Aunque reticente, Anastasia retiró su
oposición a Subaru. Tenerla totalmente de acuerdo simplemente sería demasiado
esperar. Así que, debía tomar esto como el mejor resultado.
[Anastasia: Llévate el Espejo de
Comunicación contigo. Nos pondremos en contacto, pero por ahora, fijemos la
fecha límite para reunirnos dentro de seis horas. Ten cuidado, no debemos
cometer errores a partir de ahora]
Subaru: Fecha límite, eh... olvidé
preguntar, pero, ¿qué hora es?
Julius: todavía es el mismo día, apenas se
acerca la medianoche. "Contando a partir de ahora, solo tenemos
nueve
horas”
Julius le dijo el límite de tiempo en lugar
de Anastasia.
Si celebran la próxima reunión de
estrategia en seis horas, en la práctica, solo tendrá tres horas de uso
gratuito como desea. Tendría que encontrar una manera de convencer a Anastasia
dentro de ese plazo. Luego, tendrían que encontrar la mano de obra y el plan
necesario para derrotar al Culto de la bruja y destruirlos antes de que se
agote el tiempo. Sólo entonces, se salvaría la ciudad. O, mejor dicho, eso solo
no es suficiente.
Tendrá que recuperar a Emilia. Recuperar
los recuerdos de Rem de la gula. Restaurar a las personas transformadas por la
lujuria a sus formas normales. Y solo entonces, su victoria sería completa. (ya
fue xd)
Subaru: No tenemos mucho tiempo. ¿Tienes un
mapa de los refugios?
Anastasia: Sí. Toma tantas copias como
necesites. Hemos marcado los lugares donde Ricardo y los niños del Colmillo de
Hierro ya han visitado, y los que se están revisando ahora.
Anastasia hizo un gesto a Ricardo, quien le
entregó a Subaru el mapa de su ruta. Desde las marcas sobre el nuevo mapa,
Subaru pudo ver que el Colmillo de Hierro había comenzado desde los refugios
más lejanos y se había dirigido hacia el centro. Teniendo en cuenta el estado
de la pierna de Subaru, fue una gran ayuda que solo quedaran las ubicaciones
más cercanas.
Era casi como si hubieran pensado en esto
de antemano y hubieran dejado esto para él a propósito.
Julius: Subaru, iré contigo.
Subaru: Julius... no, será mejor que no. Si
bien sería bueno tener más personas a la mano, sería un problema si no dejamos
suficiente fuerza de combate en el Ayuntamiento.
Subaru rechazó la oferta de Julius porque
dejaría al Ayuntamiento demasiado vulnerable. Ricardo volvería a patrullar, y
Subaru ya tenía la intención de llevar a Garfiel con él. A pesar de que Wilhelm
todavía estaba arriba, sería una carga demasiado pesada dejarle solo la
protección del Ayuntamiento.
Además, ya había una nube oscura sobre el
campamento de Crusch en este momento. Al escuchar la respuesta de Subaru,
Julius asintió con pesar. Siempre había sido raro verlo perder su compostura de
esta manera. Subaru le dio unas palmaditas a Julius en el hombro y levantó la
barbilla hacia Garfiel.
Subaru: Garfiel vendrá conmigo. Y veremos
si podemos encontrar más combatientes en los refugios. Intentaremos calmar a
las personas mientras hacemos eso.
Garfiel: Sí, sí, lo tengo. Déjamelo a mí.
Un poco tarde para notar la invitación de
Subaru, Garfiel rápidamente se sostuvo la barbilla y asintió. Al obtener esta
confirmación, Subaru extendió el mapa en sus manos y, con el Ayuntamiento en el
centro, comenzó a preguntarse con qué lado de Priestella debería comenzar. Su
primera prioridad debe ser asegurar su fuerza de combate, es decir, debia
averiguar qué le sucedió a Reinhardt.
Al: Si es posible, ¿podemos mirar primero
en los refugios cerca de la posada? Creo que Princess-san no pudo haberse alejado
mucho de allí
Subaru: En ese caso, estará más cerca si
pasamos por ahí... espera un minuto.
Con su dedo en el mapa, Subaru se detuvo de
repente para mirar a Al, que se había abierto camino en la conversación. Al ver
a Al inclinar su cabeza con aire confundido, Subaru lo señaló con el dedo y,
Subaru: ¿Tú... también vienes?
Al: ¿Sí? Estaré un poco preocupado si tengo
que ir solo. Y estaré aún más preocupado si no encuentro a Princess-san.
Después de todo lo que ha sucedido, no vas a hacerme vagar por mi cuenta,
¿verdad? Con las cosas como están, tengo miedo de que algo suceda si no la
encontramos pronto.
Garfiel: Así que solo el amor perfecto de
sirviente a su maestro, ¿verdad?
Tan improductivo como era este sentimiento,
Subaru estaba realmente contento de que una persona más se uniera a él. Al oír
que Al iría con ellos, Garfiel hizo una expresión de disgusto, pero, en este
punto, estaba listo para dejar de lado sus dudas por ahora. Por mucho que les
molestara, no había duda de que quería salvar a Priscilla.
Subaru: En cuanto a Priscilla... la vi en
el parque de la primera calle unos quince minutos antes de que empezara el
caos. En ese caso, ella probablemente estará en un refugio cercano.
Al: ¿En serio? ¡Esa es una información
importantísima, hermano! ¡Comencemos desde allí!
Lleno de alegría por la nueva información,
Al golpeó violentamente la espalda de Subaru. Y así, acompañados por un alegre
Al y un ceñudo Garfiel, los tres abandonaron el Ayuntamiento en su expedición a
los refugios. Todo el tiempo, mirándolos por detrás mientras se fueron.
Bufanda: Parece que nos hemos convertido en
los chicos malos...
Anastasia: Shush, bufanda-zorro. Y no es
como si no lo hubiera pensado. Pero si Natsuki-kun puede decir lo mismo cuando
regrese, entonces él no es capaz de pensar en nada.
Con una expresión de cansancio en su
rostro, susurró Anastasia, mientras la bufanda suavemente se estremeció. Y
nadie más notaría este breve intercambio entre ellos.
entonces para cuando se muere :v?
ResponderBorrarY nadie se pregunta por Otto :v?
ResponderBorrarJaja pobre otro siempre ignorado :3
Borrar